viernes, 8 de mayo de 2020

No basta la buena intención...




“No sé qué hacer… es mi mejor amiga… se empeña en que salgamos juntas y distraerme… no me deja hablar de él…  me dice: `así tus hijos no se ponen tristes y además ya ha pasado mucho tiempo´, y no sabe cuánto dolor me produce oírla… me hace sentirme culpable porque yo lo necesito… necesito expresarme, hablar, llorar, enfadarme… ella no lo entiende… pero es mi mejor amiga y sé que lo hace con buena intención…”.
Estas palabras las escuché cuando acompañaba a una persona que estaba sufriendo la pérdida de su marido hacía casi 2 años. Poco después observé su mirada agradecida y aliviada por permitirle expresar sin miedo todo lo que llevaba dentro, por acoger incondicionalmente su historia, sus palabras, sus emociones.
Como apunta Marisa Magaña, directora del Centro de Escucha San Camilo del Centro de Humanización de la Salud, en la entrevista que aquí compartimos: En el duelo no basta la buena intención, hay que saber qué hacer para ayudar de verdad, las personas se merecen una atención de calidad (…) que te escuche un amigo siempre es agradable y siempre te ayuda, pero hay veces que necesitas algo más (…)”. Marisa añade que es preciso una formación muy exhaustiva y amplia en duelo “para aprender lo más importante para acompañar a una persona que está con dificultades en su proceso de duelo (…) hay que saber que lo que digo realmente no le genera mayor culpa, o mayor rabia, sino que le acompaña (…)”.

Marina Hernando Mansillaa
Voluntaria del Centro de Escucha San Camilo Pontevedra

  • Entrevista a Marisa Magaña, directora del Centro de Escucha San Camilo del Centro de Humanización de la Salud: “¿Están preparados los profesionales para acompañar en el duelo?”